Querida Aeren,
Ayer 27 de Enero de 2015, fue un día complicado para mí.
Enfrenté al miedo cara a cara y le dí carpetazo a una etapa de mi vida que me ha hecho tanto daño...
Aeren, ayer sentí que todo había dado un giro de 180º, todavía queda mucho camino por recorrer y mucho trabajo que hacer en mi interior. Después de dos años de larga espera se celebró el juicio por lo penal que tanto miedo me daba, y sin embargo, ayer, mientras esperaba fuera de la sala 35, algo dentro de mí, me hizo volver a sentirme capaz de ser la chica de antes, la chica de antes de conocer a la persona que me ha traído hasta esta situación.
-¿Quieres que te pongamos biombo? A las mujeres víctimas de violencia de género, normalmente se lo ponemos para que no vean a su agresor.- Me dijo la secretaria del juzgado.
-No quiero biombo- respondí- quiero verle la cara. Además él no se lo espera.
Le vi. Por primera vez en más de 2 años. La sala tenía 2 bancos y era lo suficientemente pequeña para ver todo sin siquiera mover la cabeza. Le vi y me sentí valiente. Tenía ganas ya de una vez de contar lo que llevaba callada durante 4 años. 4 años que no le deseo, ni a los que fueron a su favor a declarar que tengan que vivir.
Hablé, por primera vez, sin miedo. El juez me escuchó, sin interrumpirme, aunque me salí un par de veces de las cuestiones a tratar en el juicio pero que necesitaba contar. La fiscal, por su parte, escuchó muy atenta también cada una de mis palabras. Según me iba preguntando la fiscal, y según iba contando los hechos ocurridos, me iba sintiendo cada vez más y más fuerte, más liberada.Conté todo, detalles, días, horas, formas, contexto, todo. Conté la verdad.
Me senté. Nos separaba tan solo la presencia de la mujer que me acompañaba de Atención a la Víctima. Detrás, mi madre, mi sol, sus padres. Que sabían perfectamente todo lo que me había hecho su hijo. No se movió, no gesticuló, no habló.
El juicio fue largo, 3 testigos por mi parte, 3 por la suya, su informe pericial y el mío. Con una gran diferencia: mi informe pericial data desde año 2013, el suyo, desde el 30 de octubre de 2014, fecha que se iba a celebrar el juicio y que aquí, mi colega, aplazó al ver que yo presentaba pruebas y le pedían 9 años de cárcel, pidiendo un informe pericial psicológico. Informe pericial que le sirvió de poco o nada, ya que tenía la conciencia tan sucia, que él mismo relataba y se defendía en el informe de cosas de las que no estaba acusado en el juicio.
La fiscal comenzó con el escrito de acusación, y al escucharla, al escuchar que me daba la razón, por la veracidad, por mi insistencia, por mi declaración por las pruebas aportadas y los testimonio de los testigos aportados me vine abajo. Por primera vez, alguien, aparte de mi psicóloga, mi psiquiatra y mi abogada, me daba la razón. Lloré si, pero de alegría. Emoción contenida durante tantos años... tantas lágrimas en la sala de la psicóloga, en mi casa, en mi cama, recordando situaciones, injusticias, aislamiento... ufff si lloré y descargué.
No se que pasará en la sentencia firme. Pero por fin, alguien, me daba la razón, y por fin pude enfrentarme al miedo.
Aeren, ojalá hubieras estado allí, ojalá hubieras visto como la fiscal fue a cuchillo a por él, Le pillaron en mentiras, y no se defendió. ¿Pero de qué se iba a defender?
Eres enorme, nunca lo olvides, la más grande, fuerte y asombrosa de las personas que he encontrado en el camino.
ResponderEliminarCon tesón (que no te falta) volverás a ser quien quieras ser, todo está en ti...
Gracias Paz, tu apoyo diario a hecho mucho bien en mi. Me has hecho ver las cosas desde otro punto de vista, a no tenerle miedo a nada y a sonreír todos los días!!!
ResponderEliminar"No hace falta que te diga x escrito: que si tú sonríes, alguien más va a sonreír" decía "ella baila sola" en una de sus canciones de aquellos maravillosos 90's...
ResponderEliminarNunca dejes de sonreír, porque xa muchos de los q te rodeamos es razón sobrada para seguir luchando a diario por conseguir nuestras metas
Gracias a ti por dejarme volver a compartir tu camino.